miércoles, 6 de abril de 2011

3.2. Década del '80

3.2.1. Lengua y literatura 3
El manual Lengua y literatura 3, editado en el año 1981 por la editorial Plus Ultra, se presenta desde la tapa como un libro “ajustado a los contenidos mínimos del consejo federal de educación”.
El mismo consta de nueve unidades, las cuales poseen cada una apartados de: “Lectura e interpretación de textos”, “Expresión oral”, “Discurso (estudio sistemático)”, “Expresión escrita”, “Lengua (estudio sistemático)”, “Normativa y Vocabulario”. Ninguna unidad tiene nombre.
En “Lectura e interpretación de textos” se encuentra diversas clases de textos: cuento, payada, poesía, soneto, notas periodísticas a las que los alumnos deben interpretar y luego escribir.
En “Expresión oral” se ubican los siguientes temas: conversación, el informe, la entrevista, comentario de poesía, relato, exposición, mesa redonda, debate, la alocución. Luego de las actividades, en todos los casos sigue la recitación de algún texto.
En “Discurso” se encuentran temas tales como: niveles de lengua, lengua escrita y oral, denotación y connotación, recursos expresivos, distinción entre lengua literaria e informativa, la organización de las ideas, la lírica y su lenguaje, la narración, la realidad representada, secuencia narrativa, el cuento y su lenguaje, la novela y su estructura, la obra dramática, el ensayo y el artículo periodístico. Cada tema se introduce con un apartado teórico y luego le siguen ejercicios de escritura.
En “Expresión escrita” se encuentra: la descripción en lengua informativa y literaria, la prosificación, la entrevista o reportaje, el resumen, monólogo interior, el comentario literario: poesía, narración con diálogo, acta, resumen de contenido y esquema de un cuento, argumentación, comentario de una novela, el diálogo, conversión, la narración de un texto dramático, la noticia periodística, la circular y el ensayo.
En “Lengua” se encuentra la oración, su estructura y componentes. Primero se presenta el tema teóricamente, luego siguen los ejercicios con oraciones “sueltas”. Lo mismo sucede con la normativa y el vocabulario.
Entre los apartados se encuentran “lecturas complementarias”; éstas no se expresan en el índice. En ellas encontramos temas tales como: la glosa o comentario, la historia, la biografía, la cinematografía, la publicidad, la radiofonía, la televisión, el humorismo, la epopeya, la ejemplificación, máximas y refranes, la conferencia. Estos temas sólo se expresan en teoría y, a veces, con ejemplificaciones; no poseen actividades.

3.2.1.1. La Lingüística del Texto en el manual
En “Expresión oral”, en temas tales como la conversación (la mesa redonda, el debate y la alocución) se llega a percibir un leve tratamiento teórico sobre ciertas “normas sociales”; sobre participación de interlocutores, impresión causada, actitud para escuchar, procedimientos, organizaciones, objetivos, probable reacción frente al tema, elección del tema (adecuación), estudio del lugar y la ocasión; y colaboración de los participantes. En las consignas, se pide a los alumnos realizar, por ejemplo, una conversación o un debate para luego observar sólo alguno de los aspectos mencionados arriba. Los alumnos son a la vez participantes y observadores.
En cambio, en los temas informe, la entrevista y la exposición, las consignas no se articulan con la teoría; a los alumnos sólo se les pide realizar un informe, exposición o entrevista sin realizar ningún tipo de análisis u observación después.




En este apartado se menciona una sola vez a la Comunicación, únicamente oral, sin desarrollar de ninguna manera este concepto.
Aquí, además, se menciona al Discurso/alocución, entendido como pieza de comunicación oral, adaptada a las circunstancias, es un acto psicosocial. Luego se realiza una tipología de discursos sin mencionar el criterio de clasificación que se utiliza, pero se puede llegar a inferir que tiene en cuenta la temática, ámbito y objetivo. Los criterios son diversos y poco claros.
Los tipos de discurso serían: académico, político, forense, religioso, ceremonial, militar, artístico. El concepto de discurso es acotado, ya que es entendido principalmente como pieza oratoria que sigue determinado esquema. En las consignas, los aspectos psicosociales mencionados en la teoría no son tenidos en cuenta.












Los diversos textos presentes en este apartado no son incluidos en ninguna clasificación.
En “Discurso y Expresión escrita”, la lírica es considerada género y clase de literatura en verso. Luego se mencionan clases de poesía lírica según su contenido: oda, elegía, madrigal, himno, canción, balada, letrilla, epigrama, sátira y epístola.
El cuento es definido como una narración breve y forma literaria autónoma. Luego se hace una clasificación de los cuentos, aclarando que hay diversos criterios: didácticos o moralizantes, costumbrista, de aventura, romántico, realista, popular, fantástico e histórico.
La novela es considerada obra narrativa y género, luego género literario. Luego se mencionan diversos tipos/clases de novela: pastoril, picaresca, de caballería, biográfica, histórica, sentimental, de aventura, policial, social, ideológica, psicológica, poética y de acontecimiento. Se menciona que cada novela tiene estructura propia y que ésta puede “cruzarse con otros géneros literarios”.
El drama es definido como obra literaria, luego se nombran especies/clases de obras teatrales según el tono: tragedia, comedia, drama, farsa, sainete. Más tarde se dice que el teatro es un género literario. Es decir, que los géneros que supuestamente se tienen en cuenta son el lírico, narrativo y drama; después se mencionan sus “clases”, “tipos” o “especies”. En la teoría de cada capítulo no se relacionan los grandes conceptos, como el de género, en la medida en que se dice, por ejemplo, que dentro de los géneros se encuentra el lírico, narrativo o dramático, o por ejemplo que el cuento pertenece al género narrativo. Lo rescatable es la mención de lo difícil que es hacer una clasificación, debido a que hay diversos criterios que se pueden tener en cuenta.
Por otra parte, en este apartado, clases textuales como el acta, artículo periodístico, la circular no son incluidos en ninguna clasificación. Sólo se menciona que el artículo periodístico puede adoptar diversas formas: noticia, crónica, nota, comentario, reportaje, entrevista, editorial, crítica, colaboración. Y dentro de la noticia hay diversas clases: deportiva, artística, de interés general y económica. Aquí el ensayo es definido como una forma literaria y como un género abierto, el cual se divide en dos tipos: formal e informal.
No hay clasificación más allá de la de los géneros literarios; así, diversas clases textuales aparecen como aisladas unas de otras, más allá de sus propias subdivisiones (como es el caso del artículo periodístico). Las consignas que siguen son de redacción y comentario de los textos.
En “Lengua” la oración sigue siendo la unidad mayor de análisis gramatical (p. 21).
Por último, cabe mencionar que a través de un apartado que no aparece en el índice: “Lectura complementaria” se incluyen diversas clases textuales tales como: máximas y refranes, conferencia, la glosa, la biografía y artículo de costumbre, sin clasificación explícita. Sólo el humorismo es considerado como especie literaria.
Luego se menciona a la cinematografía como “la forma más moderna de la literatura dramática”, a la publicidad (no se dice qué es), a la televisión y a la radiofonía.
La radiofonía es definida como una variedad del periodismo. Luego se dice que los otros géneros literarios también tienen cabida en este medio de difusión: la lírica, la narrativa, el teatro, el ensayismo, la oratoria, la didáctica, etc.


Es decir que en este apartado “complementario” se explica que dentro de los géneros literarios se ubican: el periodismo, la lírica, la narrativa, el teatro, el ensayismo, la oratoria, la didáctica entre otros. O sea que el concepto de género sigue sin ser claro, ni es tratado ni mencionado de manera ordenada en el manual (p. 132).
Cabe decir que este manual no tiene una organización adecuada de los conocimientos, por lo tanto no los facilita. El principal problema es que no se establecen relaciones entre los contenidos.

3.2.2. Nuevo castellano 3
El libro Nuevo castellano 3. Lengua y Literatura, de 1982 elaborado por Rosetti y Lacau muestra una profundización de algunos de los conceptos ya planteados en el libro de 1975, así como el replanteo de varios puntos.
La presente nueva edición de nuestro texto contempla una vez más los intereses de los estudiantes secundarios a quien está dedicado, y por ello trata de acercarlos a los planteos renovadores en el campo de la lingüística, de la investigación literaria, de la teoría de la comunicación y de la literatura juvenil… El objetivo fundamental de nuestra asignatura apunta a que el estudiante adquiera el adecuado manejo de la lengua oral y escrita a fin de lograr una eficaz relación social en la comunidad y el acceso a los valores culturales, en particular, los literarios (p. 1)
El capítulo 2, titulado “Estudios sistemáticos, El discurso”, se divide en las siguientes partes: la lírica, el lenguaje, la versificación, el intertexto, las oraciones y la actitud del hablante, los moralizadores, el lenguaje y las artes plásticas.
Toma conceptos nuevos, “que señalan los rumbos hacia los que se va orientando la lingüística actual”, como el análisis del discurso y conceptos de texto y contexto. Explican, también, de gramática oracional y gramática transoracional.
Definen la gramática transoracional como la que se ocupa del discurso, de las unidades lingüísticas que se proyectan “más allá de la oración”. Reconocerán el discurso como una secuencia de oraciones y, asimismo, a unidades que no se identifican con las oraciones (las categorías de narrador –en 3ª persona, omnisciente, etc.), núcleos, catálisis, índices en la narración; hablante imaginario, oyente imaginario, mundo imaginario, en el texto literario; premisas y conclusiones en textos informativos.
En el manual se dice que la gramática transoracional tiene como una de sus metas clasificar los discursos; otra de estas metas es la de combinar unidades lingüísticas para comprender y producir textos.
Algunas definiciones, aunque escuetas, son imprescindibles para explicar la teoría.
Para que una serie de oraciones integren un discurso deben estar conectadas entre sí; lo cual significa que están relacionadas semánticamente (por su contenido) (p.12)
Surgen otros conceptos, como el de tópico, al que define como “aquello de lo que quiere hablar el locutor. Lo que dice del tópico es el comentario. “El tópico es, pues, el tema que interesa al hablante” (p.12).
Aunque se repite el esquema de Jackobson, hace aparición el concepto de contexto.
Esta palabra está adquiriendo gran importancia en el análisis y manejo del lenguaje y su significación ha tenido distintos alcances. En principio podemos aceptar que el contexto señala desde la posición de los participantes (sus características biopsíquicas, su mundo espiritual) hasta las condiciones en que se produce el texto: lugar, tiempo, ambiente natural, organización de la comunidad, tradiciones literarias y culturales (p. 17).

Los autores mencionan de manera superficial las siguientes clases de discursos:
1. por las funciones del lenguaje: informativo, expresivo, apelativo
2. por el modo de construcción: narración, descripción, diálogo, exposición
3. por la diagramación: verso, prosa corriente, diálogo
4. por la intención estética: literario, no literario.
5. Por las funciones del lenguaje: fático, metalingüístico y poético.

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